¿Por qué me encantan los juguetes LELO?

Por fin, después de esperar poco más de una semanita, hoy he recibido el libro LELO Ten Years of Pleasure. Como me pasa con todos los juguetes LELO, el libro me ha encantado.

El libro aborda temas muy interesantes, por ejemplo cómo la marca comenzó en la industria de los juguetes eróticos y cómo han transformado dicha industria. Y es que cada uno de los juguetes de la prestigiosa casa sueca destila glamour, elegancia, simpleza y belleza. Así de sencillo.

Si LELO fuera una marca de coches, se percibiría como Aston Martin o incluso Rolls Royce. Un buen ejemplo de la capacidad de LELO de llegar al mercado Premium es el vibrador Inez, un estupendo vibrador bañado en oro de 24 kilates.  No se puede pedir más.

No voy a negar que me gustan las cosas buenas, no necesariamente tienen que ser caras, pero uno de los requisitos que un artículo tiene que cumplir para que me guste es que tenga un diseño elegante, pulcro y a la vez tentador, que esté fabricado con los mejores materiales y que detrás haya una garantía de que tengo en mis manos algo especial.

Os cuento un poquito sobre cada uno de los juguetes LELO que tengo y la razón por la que me gustan.

Lelo Luna Beads. No es difícil entender por qué son mis favoritas. Creo que son las mejores bolas chinas que hay en el mercado, además de la posibilidad de combinar pesos y lo placenteras de las vibraciones de sus bolas internas hacen de las Luna Beads un artículo imprescindible. Cada juego de bolas chinas Luna Beads trae cuatro bolas, dos más pesadas y dos más ligeras, intercambiables entre ellas para que puedas combinar los pesos. Hay dos versiones, las Luna Beads y las Luna Beads Mini. La diferencia es que las Mini son más pequeñas y son para chicas que no han dado a luz y menores de 30 años, por lo que si tienes más de 30 o eres madre, las estándar son las ideales para ti. Si quieres comprarlas a buen precio haz clic aquí

Lelo Luna Beads

Lelo Ina 2: Según mi punto de vista es el caballo de batalla de la marca. Es un vibrador grande, sólido, bien construido. Estilo conejito para estimular tanto clítoris como Punto G. Las vibraciones son fuertes y se puede usar también externamente, por ejemplo para un excitante masaje por pezones y otros puntos erógenos. Podéis ver el Ina 2 en la siguiente imagen:

Lelo Ina 2

Lelo Iris: Antes de comprar el Iris estaba considerando comprarme el Mona 2, sin embargo un par de razones hicieron que me inclinara por el Iris. La primera es que el Mona 2 es prácticamente idéntico al Ina 2 sin la extensión para clítoris. La segunda es que la textura del Iris, a semejanza de una rosa que se abre en su capullo, me cautivó. Eso sumado a que es un poco más ancho que el Mona 2 hizo que me inclinara por el. Sí que he de decir que sus vibraciones son ligeramente menos potentes que las del Ina 2, pero aún así es un objeto de placer sublime. Aquí lo tenéis en la siguiente imagen. ¿No te parece preciosa su textura similar a una flor que se abre?

Lelo Iris

Lelo Gigi 2: Siempre quise tener un buen vibrador de Punto G y estuve a punto de comprar la primera versión del Gigi, sin embargo lo fui dejando pasar hasta que vi que había salido la nueva versión, el Gigi 2, que es básicamente igual pero con vibraciones mucho más potentes y ocho modos de vibración en lugar de las cinco que tenía la primera versión. Tengo que decir que estoy absolutamente enamorada del Gigi 2, y si piensas comprarte un vibrador de Punto G y puedes invertir unos 90 Euros es una compra más que buena. Ten en cuenta que cuesta solo un poco más que ir a repostar gasolina, y créeme si te digo que vale le pena ahorrar un poco de gasolina y darte este capricho. Si pudiera tener solo uno, estaría entre el Gigi 2 y el Ina 2, a pesar de que son bastante diferentes entre ellos.

Lelo Gigi 2

Y hasta aquí la lista de los juguetes LELO que tengo. Estos días he estado mirando el Tiani 2  y el Ida, porque hace tiempo que quiero un vibrador para pareja y el We-Vibe no me convence. En cuanto me compre el Tiani 2 o el Ida, o algún sex shop caritativo me envíe alguno para probarlo, os contaré que tal, aunque no dudo que la experiencia será sublime.

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El furor del We-Vibe 4

Con el lanzamiento del We-Vibe 4 se ha demostrado que la gente de We-Vibe sabe de márketing.

El furor que este vibrador para parejas está causando es digno de escribir un libro. Parece casi como el lanzamiento que hace Apple de sus productos. Primero los rumores, las filtraciones a la prensa, las fotos clandestinas. Solo les falta decir que también lo van a sacar en blanco!

Y lo consiguen! Me consta que ha habido una gran expectación para comprar este vibrador para parejas que tanto está dando de que hablar. 

El We-Vibe 4 se lanzó el 25 de Octubre en casi todo el mundo y yo aún no lo he comprado, pero he estado analizando el de una amiga. El tacto es muy sedoso, fabricado con silicona hipoalergénica, y comparado con mi We-Vibe 3 es bastante más pequeño, además las vibraciones parecen ser más potentes. El mando también cambia, ahora tiene dos botones más para controlar sus 6 modos de vibración y ahora tiene 10 niveles de intensidad. 

Además de ser más pequeño, hay otras diferencias. Por ejemplo el estimulador del clítoris tiene ahora una forma curva, cóncava, y también sufre un rediseño la parte estimuladora del Punto G.

Por supuesto es resistente al agua  y viene en un estuche con el cargador.

Y no, no se puede comprar ni en blanco ni en negro, pero sí que podemos comprar We-Vibe 4 en rosa o morado. 

La verdad es que he estado pensando en comprar uno para sustituir a mi We-Vibe 3, pero debo reconocer que me tiene encandilada el Lelo Ida, ya que tiene unos movimientos rotatorios que el We-Vibe 4 no tiene. Imagino que tendré que decidirme en algún momento, pero mientras el mío sigue funcionando de maravilla.

Aquí una imagen del We-Vibe 4, con su cargador y su mando a distancia.

Y en esta imagen podemos ver cómo se reduce el tamaño respecto a la versión anterior:

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Me encantan los juguetes eróticos

Soy Gabriela, me encantan los juguetes eróticos, y quiero compartir mi afición con todos vosotros!

Ya, ya lo se, vais a decir que soy una viciosa, una insaciable, o una chica multiorgásmica de esas con las que muchos hombres sueñan.

Pero no, no soy así. Soy una chica normal, o al menos eso pienso yo, aunque muchos de mis amigos no están muy de acuerdo. Estudio, intento trabajar a ratos, y tengo aficiones como el surf, salir de fiesta, subir a las montañas y uno de mis hobbies favoritos son los juguetes eróticos. 

Me gustan mucho, y la verdad es que no los uso para sustituir a mi novio, sino porque me producen unas sensaciones que me encantan y que a veces son diferentes a las de la vida real, o mejor dicho, diferentes al sexo real.

Yo creo que tod@s tenemos que tener nuestros caprichos, y si todas las personas reconocen que al menos en un momento se han masturbado, ¿qué diferencia hay con usar un juguete diseñado para ello?

La verdad es que mi afición no empezó con los juguetes eróticos en si, sino mas bien con las bolas chinas. Mi madre tenía algunos problemas de salud y su ginecólogo le aconsejó realizar los ejercicios de Kegel, así que una amiga le recomendó las bolas chinas y, después de consultarlo nuevamente con el ginecólogo, éste le dijo que eran una buena idea.

Así que mi madre se compró unas y, no se por qué, compró otras para mi, algo más pequeñas que las suyas. Al usarlas sentía una sensación muy agradable, diferente a otras cosas que había sentido con el sexo real o con la masturbación, así que me imaginé como sería usar uno de esos vibradores que giran dentro de ti. 

Pasaron dos meses y compré mi primer vibrador, uno baratito, de plástico más bien transparente y que funcionaba con pilas y además tenía luces. Lo reconozco, lo de las luces es una chorrada, pero se veía chulo en la foto de la caja.

Aquella sensación me cautivó, rompió todos los esquemas y comencé a ver las cosas de manera diferente. Me encanta el sexo, pero aquello era otra cosa. Yo todavía no quería decir nada a mi pareja, pues no estaba segura de lo que pensaría de mi. 

Pasaron unas tres semanas y una tarde, mientras disfrutaba de mi momento, sentí un ruido extraño dentro de mi amigo de plástico transparente, luego otro, luego un zumbido, hasta que finalmente....nada. Muerto, totalmente muerto, dejándome a medias y con una sensación algo extraña.

Desde ese día empecé a buscar vibradores que fueran de mejor calidad y fui reuniendo una colección que quien la vea pensará que soy una viciosa. Y es que me encantan, y ahora a mi pareja, que ya lo sabe, también. Muchas veces pensaba en que estaba gastando demasiado dinero en ellos, pero luego comparé y me dije, "a ver, ir al cine con mi chico a ver una peli y comprarnos unas palomitas y la Coca Cola cuestan lo mismo que un vibrador normal, y sinceramente...¿qué plan es más excitante?" Creo que dejaré para después contaros la historia de como usar un vibrador en el cine, jaja, pero como ya dije, esa es otra historia.

Así que esa es más o menos mi vida y la razón de este blog, compartir mi afición por esos juguetes tan chulos y dar mis opiniones sobre los que más me gustan, para que otras chicas puedan disfrutar de lo mismo que yo, en caso de que no los hayan descubierto.

Y es que no hay nada mejor que el placer.